Cultura en crisis

Artistas de Olavarría alzan su voz contra el vaciamiento cultural

Rosana Farana y Adriana Saravia, figuras del arte en Olavarría, denuncian el impacto devastador del DNU de Milei y el Proyecto de Ley Ómnibus en la cultura local, mientras destacan la importancia del apoyo municipal y la resistencia artística.

Magdalena Jaureguiberry - Agencia Comunica

31/01/2024

El rechazo al controvertido Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) propuesto por el Presidente de la Nación Javier Milei no sólo resuena en el ámbito nacional, sino que también encuentra eco en la comunidad artística local. Dos mujeres artistas de la ciudad de Olavarría, Rosana Farana y Adriana Saravia, comparten su perspectiva sobre la importancia de la cultura y el impacto que estas medidas tendrían en el sector.

Rosana Farana, artista plástica, destaca la importancia de la movilización y la resistencia ante el vaciamiento cultural propuesto por el Proyecto de Ley Ómnibus y el DNU. Desde la creación de la Asamblea Unidxs por la Cultura Olavarría, “ esta tiene sede todos los jueves a las 18.30 hs en las veredas del Teatro Municipal como sede simbólica del reclamo” resaltó Farana, esta artista ha liderado iniciativas para hacer visible el impacto de estas propuestas en la sociedad. A través de acciones en espacios públicos, como lo es el Teatro Municipal, y encuentros que promueven la participación y la expresión artística, “en ellos invitamos a la comunidad a que se una en defensa de la cultura y los organismos históricos de financiamiento” subrayó la artista plástica.

Adriana Saravia, cantora y docente de canto, se suma al llamado de Farana, destacando el apoyo brindado por el Municipio de Olavarría a esta movilización. “ Quiero destacar el respaldo del gobierno local al trasladar las actividades municipales a otros espacios, permitiendo que el Teatro Municipal se convierta en un punto de encuentro y protesta para los artistas” destacó Saravia. Agradece este gesto, y defiende la importancia de una cultura respaldada económicamente por el Estado y accesible para todos, no solo para unos pocos privilegiados.

Ambas artistas coinciden en la necesidad de defender los espacios de creación y expresión cultural, así como en el papel fundamental que desempeña el apoyo estatal en el desarrollo y la difusión de la cultura en la sociedad. En un contexto de incertidumbre y amenazas para el sector, Farana y Saravia suman su voz a la causa para recordar que la cultura no es un privilegio, sino un derecho de todos los ciudadanos.

¿En qué aspectos el DNU afecta al patrimonio cultural nacional?

El panorama cultural argentino se ve sacudido por la presentación de un controvertido Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) por parte del Gobierno, enviado al Congreso por el Presidente Javier Milei el 28 de diciembre. Este paquete legislativo, que ha generado un profundo malestar en diversos sectores, contempla una serie de medidas que impactarían de manera significativa en la industria del arte y la cultura en todo el territorio nacional.

Uno de los puntos más ásperos del proyecto es la propuesta de eliminar dos instituciones clave: el Instituto Nacional del Teatro (INT) y el Fondo Nacional de las Artes (FNA). Estos organismos, encargados de proteger y fomentar la cultura teatral y artística en el país, serían clausurados bajo esta iniciativa, dejando a numerosos proyectos y artistas en una situación de incertidumbre y desamparo.

El Instituto Nacional del Teatro (INT), establecido en virtud de la Ley Nacional del Teatro (24.800) de 1997, desempeña un papel fundamental en la promoción y apoyo de la actividad teatral en Argentina. Su eliminación implicaría la desaparición de concursos, certámenes, muestras, festivales, así como la reducción de subsidios y becas para grupos y artistas, dejando en una posición precaria al circuito teatral independiente del país.

Por otro lado, el Fondo Nacional de las Artes (FNA), creado en 1958 con el fin de promover y desarrollar la producción artística en todas sus formas, se vería también afectado por esta medida. La supresión de este organismo autárquico representaría un duro golpe para la comunidad artística, al privarla de recursos y apoyo para la formación y creación de obras.

Pero el alcance del DNU de Milei no se detiene ahí. También se contempla el desfinanciamiento de importantes instituciones culturales como el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), el Instituto Nacional de la Música (Inamu) y la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (Conabip). Estas entidades, vitales para el desarrollo y la difusión de la cultura en sus respectivos ámbitos, se verían seriamente perjudicadas por la reducción o eliminación de sus recursos financieros.

En el caso del INCAA, si bien el proyecto no propone su cierre, sí plantea una significativa reducción de sus fondos y cambios en su estructura y funcionamiento. La posible eliminación de adelantos de subsidios y la concesión de créditos a tasas de mercado podrían impactar negativamente en la producción cinematográfica nacional y en la industria audiovisual en general.

Además, el desmantelamiento del Instituto Nacional de la Música (Inamu) y la transformación de este ente en un mero "programa" de la Secretaría de Cultura representaría un cambio drástico en su naturaleza y funciones, poniendo en riesgo el apoyo y la promoción de los músicos independientes en el país.

Por último, el proyecto también afectaría al mundo del libro, proponiendo la derogación de la Ley de Defensa de la Actividad Librera, lo que podría poner en peligro la existencia de pequeñas y medianas librerías, así como el acceso a la lectura en Argentina.

Ante esta situación, diversas entidades y sectores culturales han comenzado a manifestar su rechazo al proyecto, advirtiendo sobre las graves consecuencias que podría tener en la vida cultural del país. La eliminación de instituciones, el desfinanciamiento de proyectos y la reducción de recursos para el arte y la cultura amenazan con afectar profundamente a una de las industrias más importantes y vibrantes de Argentina.