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El último caso expuesto por el Ministerio Público Fiscal en la audiencia del jueves fue el de Juan Carlos Butera, quien el 1° de noviembre de 1977, fue secuestrado cuando salía de la escuela Comercio de Olavarría. Butera estaba terminando la secundaria nocturna, trabajaba en el Penal de Sierra Chica y era amigo de Alfredo Maccarini.

Sobre el secuestro el fiscal Juan Manuel Portela narró que ese día al salir de la escuela Butera se encontró con su padre quien le dijo que lo estaban buscando, cuando Butera salió vio que estaba todo lleno de soldados dijo que lo agarraron del brazo le pusieron una capucha y lo subieron a un camión. De ahí lo llevaron a la Comisaría de Olavarría donde lo ataron, lo golpearon y le aplicaron picana eléctrica.

El 2 de noviembre lo trasladaron al Centro Clandestino Monte Pelloni, sobre esta situación la fiscalía recuperó la declaración testimonial de Butera, en la que él contó lo sufrido en el centro clandestino de detención:"Lo ataron de pies y manos y le aplicaron picana eléctrica por varias horas, sufrió terribles golpizas y  fue sometido a simulacros de fusilamiento", “lo torturaban dia por medio y a la fecha continúa con problemas auditivos de los simulacros de fusilamientos” detalló el fiscal.

Posteriormente comenzó su recorrido por diversas unidades penales donde por ser considerado subversivo o detenido especial "traidor", recibió mayores tormentos y padecimientos. Portela hizo hincapié en esta situación y para ello mencionó nuevamente la declaración de Butera, declaración en la que Juan Carlos Butera afirmó que en su paso por la a la Unidad N°7 de Azul, todos los empleados de la cárcel lo golpearon, en la Unidad N°9 de La Plata, fue recibido con golpes y castigos. En referencia a la estadía en la cárcel de Caseros, Portela citó las palabras explícitas de la declaración “fue el peor lugar que conoció en su vida”.

Por último Portela expuso que el 12 de enero de 1978 se dispuso a Butera en manos del Poder Ejecutivo Nacional. En ese entonces sus padres fueron a seis embajadas de distintos países a solicitar una visa para su hijo. La primera que llegó fue la de Canadá y la aceptó. El 5 de noviembre de 1979, el Poder Ejecutivo le permitió salir del país, lo cual se concretó recién el 2 de marzo de 1980. Desde ese entonces hasta el día de la fecha Juan Carlos Butera vive en Canadá.