Alrededor de las 13:00 horas la fiscalía procedió a exponer las pruebas vinculadas a los casos de Roberto Edgardo Pasucci y Guillermo Oscar Luján Bagnola. Fueron secuestrados el 20 de septiembre de 1977 por un grupo de personas armadas vestidas de civil, quienes irrumpieron violentamente en el domicilio que vivía Pasucci en la ciudad de Olavarría.

Portela detalló que al ingresar a la vivienda los captores dieron con Guillermo Bagnola quien se encontraba en el lugar estudiando y allí mismo fue secuestrado. Pasucci pese a que logró escapar de la casa fue capturado a pocas cuadras del lugar.

Bagnola fue trasladado a la Comisaría de Olavarría y luego fue llevado a Monte Pelloni donde fue torturado mediante el paso de corriente eléctrica en todo su cuerpo y sometido también a varios golpes. El 24 de septiembre fue liberado en la ruta frente a la fábrica Cerro Negro.

En relación a Pasucci, Portela narró que en ese entonces pertenecía a la Juventud Universitaria Peronista y que inmediatamente después de su secuestro fue llevado a Monte Pelloni donde fue sometido a torturas y tormentos. A mediados del mes de octubre de 1977 fue trasladado, atado, esposado y encapuchado, junto a Maccarini, Méndez, Jorge Oscar Fernández  y Sampini al centro clandestino La Huerta, allí padeció nuevamente sesiones de tortura. Luego fue regresado a Monte Pelloni junto a Méndez y Sampini; Fernández y Maccarini nunca más regresaron.

El 2 de noviembre, al igual que el resto de las víctimas, Pasucci fue llevado a la Escuela de Regimiento de Olavarría donde fue obligado a firmar encapuchado una declaración autoincriminatoria para luego ser sometido al Consejo de Guerra Especial Estable, juicio que se desarrolló en diciembre. En relación a este proceso, Portela se refirió al mismo como una "parodia de juicio", incluso mencionó una situación donde la defensa de Pasucci le dijo a uno de los guardias que lo custodiaba “si se te escapa un tiro pegale a este”. Pasucci fue condenado a 16 años. En su condena pasó por diversas unidades penales en la categoría de “detenidos especiales, detenido subversivo”. Recuperó su libertada el 25 de diciembre de 1982.

En la culminación de la exposición del caso, Portela se refirió al daño que le ocasionó a Pasucci su secuestro, heridas que persisten hasta el día de hoy al punto tal que sus padecimientos por todo lo sufrido le han impedido declarar sobre los hechos en distintas oportunidades. “No pudo hacerlo en 1984 frente a la CONADEP, no pudo hacerlo en el 2006, no pudo hacerlo en el juicio Monte Pelloni I y tampoco pudo hacerlo en este debate”, cerró el fiscal.